AUTORIDAD Y PAUTAS EDUCATIVAS RESPONSABLES-AFECTIVAS

AUTORIDAD Y PAUTAS EDUCATIVAS RESPONSABLES-AFECTIVAS

Estas pautas permiten propiciar orientaciones claras y bien definidas, favoreciendo el buen clima familiar y respetando la autoridad cuando les hagamos peticiones.

Para que sean efectivas debemos poner atención a los siguientes aspectos:

-EXPLICAR qué es lo que queremos que haga y cómo ha de hacerlo. ¿Por qué es bueno que lo haga?¿qué pretendemos conseguir?

Las explicaciones ayudan a que comprendan lo que les pedimos y por qué se lo pedimos. El objetivo es que comprendan que lo que pedimos pueden hacerlo y es bueno para ellos.

-ENSEÑAR que tiene que hacer y cómo lo ha de hacer. Hemos de servir de modelos para que comprendan bien lo que han de hacer y cómo.

-MOTIVAR para que lo haga. Podremos utilizar un premio o un castigo, el premio ha de darse a corto plazo, que sea algo diferente, que despierte su entusiasmo. El castigo también ha de cumplirse, teniendo en cuenta que hemos de elegir un castigo apropiado a la edad del niño y que no sea físico…por ejemplo:quitarle tiempo de tele, de juego.

Recordar que pegar:

-les hace entender que la violencia se usa para educar.

-quien manda es la persona violenta

-no es una buena estrategia para educar

-provoca miedo y dolor

-desvaloriza la importancia del diálogo y la comprensión.

-pegando no enseñamos respeto y responsabilidad.

-PEDIR al niño, aquello que el niño pueda hacer .Es importante conocer las etapas evolutivas de los niños.

-En ocasiones ACTUAR más que hablar. Hay situaciones que con la mejor intención les explicamos excesivamente aquello que han de hacer, intentando razonar…con ellos se ha de actuar desde el afecto y la comprensión… que sepan que ante su respuesta “negativa” habrá consecuencias.

Actuar en lugar de hablar ayuda a que nuestros hijos comprendan que lo que hacen bien tiene consecuencias buenas y lo que hacen mal tienen consecuencias malas.

-Buen TONO. La petición más coherente si se dice de forma poco conveniente nos desautoriza.

Cuidar el tono implica:

• firmeza y serenidad… se les pide algo porque pensamos que tienen la capacidad y la edad para poder hacerlo. La consecuencia de no cumplir lo acordado se da por el incumplimiento de la norma no por nuestro mal humor

• No humillar, no despreciar, no ser irónicos

-Usar la PACIENCIA .Ser paciente implica padecer sin alterarse. Pensemos que las metas educativas se consiguen a largo plazo.

-Buscar LA COLABORACIÓN Y COORDINACIÓN ENTRE LOS PAPÁS Y EL COLEGIO. No desautorizar ni desvalorizar a la pareja ni a los profesores. Pensar que si lo hacemos estamos perjudicando a nuestro hijo modelando un comportamiento que propiciará dificultades en habilidades sociales..

-Ser conscientes de que somos padres y hemos de educar a nuestro hijos, esta claro que educar es duro, pero proporciona grandes satisfacciones cuando comprobamos que nuestros hijos crecen asumiendo responsabilidades y sobre todo felices.

Marién